jueves, marzo 10

A ciegas (mirando)

Porque el amor es ciego, es que se construyen los errores, los aciertos, las tierras y los cielos.
Ciertamente, hubiera desaparecido el mundo si el error no hubiera actuado, casi azarosamente en contraposición a una fuerza equitativa de acierto.

Porque el amor es ciego, queremos y dañamos. Y la pasión envuelve el tono en que agitamos el universo y los colores con que lo pintamos.
Pero el error también es acierto, y necesario. Tolerablemente, es indispensable algún defecto, alguna herida que marcar para que sangre y la sangre misma se renueve.
Sangra para sentirse que se está vivo. Sangra para fluir, como un torrente de agua cristalina.

Porque el amor es ciego, sangramos. Nos lastimamos. Y, sin embargo, en definitiva sangrar es solo una manera de decir que amamos. De reencontrarnos en un abrazo. Como aquel loco que se abrazó a una cruz y sangró, crucificado. Ciego de amor, solo para decirnos que hemos sido amados.

PD: Cuando los tajos se abren, y el dolor no cesa, calma el alcohol o en su defecto el potente rayo luminoso de la amistad. Un "te quiero" a tiempo siempre es válido!!!.


*Dedicado a mis compañías de viaje, ya entienden por qué.

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